La odontología integral es un concepto que entiende a la persona como un ser único y completo, ofreciéndole un tratamiento global y personalizado, en el cual se tienen en cuenta todos los factores que pueden intervenir en su problema bucodentario. La diferencia entre la odontología integral y la convencional radica en la actitud personal del odontólogo y, en ningún caso, son excluyentes una de la otra. Es mucho más simple: la odontología integral trabaja con todas las especialidades de la convencional, con todos sus beneficios (tecnología y métodos) y seguridad para el paciente (reconocimiento de la valía del especialista obligatoriamente colegiado, estudios, títulos y especializaciones que le acreditan, seguro médico, etc.), pero además, aporta soluciones añadidas en aquellas ramas o en aquellos casos en las que la medicina convencional no da respuesta a la demanda de salud de los pacientes, evitando todos aquellos procedimientos que sean o puedan ser perjudiciales para ellos ...